MISIÓN DE LOS NUNCIOS APOSTÓLICOS
La misión de los Nuncios del Romano Pontífice está regulada por las disposiciones del Motu Proprio “Sollicitudo Omnium Ecclesiarum” de Su Santidad Pablo VI, del 24 de junio de 1969, y por los cánones 362-367 del Código de Derecho Canónico. La figura del Nuncio Apostólico está prevista también en la Convención de Viena de 1961 sobre las Relaciones Diplomáticas.
El Nuncio Apostólico en Colombia es el Decano del Cuerpo Diplomático.
Entre las competencias más señaladas de la misión del Nuncio Apostólico, destacan:
- Representar al Romano Pontífice, de modo estable, ante las Iglesias particulares y ante los Estados y autoridades públicas.
- Procurar que sean cada vez más firmes y eficaces los vínculos de unidad entre la Sede Apostólica y las Diócesis que se hallan en la demarcación señalada para su delegación.
- Colaborar con los obispos para fomentar las oportunas relaciones entre la Iglesia Católica y otras denominaciones religiosas, así como con las Autoridades del Estado.
- Esforzarse para que se promuevan iniciativas a favor de la paz, del progreso y de la cooperación entre los pueblos.